MiercoLees en La Manzana de Eva: No me alcanzará la vida
En esta ocasión recomendamos en La Manzana de Eva, a través de Sii TV, el siguiente libro:
No me alcanzará la vida
Celia del Palacio
No me alcanzará la vida es una novela de corte histórico recién publicada por la investigadora y escritora Celia del Palacio. Se trata de un libro de 499 páginas que pueden leerse con completa entrega y sin brecha de por medio, gracias a la maestría con que del Palacio traza las acciones de sus personajes. La autora nos ofrece dos historias en un solo libro: la historia del personaje jalisciense Miguel Cruz-Aedo, liberal acérrimo, que participó como escritor y como militar en los conflictos políticos de la segunda mitad del siglo XIX, y la historia de una investigadora contemporánea que navega en los archivos históricos de Jalisco y Durango, indagando sobre la vida de Miguel Cruz-Aedo. El enlazamiento de estas dos historias le da un dinamismo cuyo efecto es leer con frescura eventos decimonónicos tapatíos. Personajes como Ignacio Herrera y Cairo, Ignacio Vallarta, José María Vigil, Emeterio Robles Gil y Jesús Villaseñor, cobran vida en las antiguas casas y calles de Guadalajara. Del Palacio logra con un vocabulario especializado de la época recrear los vestuarios, las habitaciones, los medios de transporte, el escenario incipientemente urbano de Guadalajara. La labor de investigación subyacente a esta colosal novela se confirma en lo que podríamos llamar la segunda historia: la historia de una joven, llamada S., que se encuentra haciendo su tesis doctoral en la ciudad de Guadalajara. En esta historia la autora nos deja “espiar” de qué manera S. encuentra información no sólo en los archivos, sino en los recorridos antropológicos que hace por la ciudad, en busca de los puntos geográficos exactos en donde otrora estuvieran las habitaciones de sus personajes. La investigación de S. poco a poco pasa a ser una obsesión por los datos que le permitan dibujar la realidad cotidiana, literaria y política de Guadalajara; pero también poco a poco se convierte en una pasión por el personaje principal, Miguel Cruz-Aedo. La participación histórica de este personaje se enlaza de manera inmediata con Sofía viuda de Porras, originaria de Santiago Papasquiaro; Sofía es una sensual pelirroja cuya inteligencia la aleja de las prácticas religiosas tradicionales y la coloca en el desarrollo pleno de su libertad. Su libertad de conciencia es también gusto por el discurso literario y por una vital explosión erótica.
El amor que tiene lugar entre Miguel y Sofía es tan transgresivo como suelen ser los amores genuinos. Celia del Palacio nos deja descubrir que la irreverencia, en las tierras cristeras, hoy teñidas de mojigatería y yunquismo, no es algo ajeno ni nuevo. La autora logra pasajes memorables cuando se encuentran el magnetismo lleno de virilidad de Miguel y la belleza acompañada de ideas de Sofía.