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Pero el misterio no está allí.
PERO EL MISTERIO NO ESTÁ ALLÍ, donde nosotros creemos,
está en miopía-muerte,
en su encandescente frescura que se repite ansiosa;
duermo, despierto, me veo en el espejo; la lluvia pisotea.
Una figura más, una hoja más, un centímetro más de
envejecimiento,
un deleznable humor que humea, un éxtasis que empieza
el lunes
y termina el lunes.
El ciclo es ciclo y punto, el sueño no ve el fondo
de sus espectros, el día los dibuja y la noche los vuelve
incontenibles, los enloquece para vomitarlos de nuevo.
Tu nombre, partícula furtiva del universo,
de mi lenguaje repetido para nombrarte: hoja,
cuerpo desnudo,
débil,
moda ingenua de lo humano.
(de Palabra Erótica)
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