Siempre es interesante acercarse al mundo de los jóvenes y, desde dentro, conocer sus motivaciones, sus sueños, sus frustraciones, sus traumas, sus fantasías, sus amores y sus desengaños. La antología de Par Tres 2011 nos ofrece justamente eso: la visión de lo cotidiano desde el punto de vista de los jóvenes. Con un lenguaje fresco, ágil, sin acartonamientos y a veces, incluso, saltándose las reglas, los autores de la antología nos permiten ver el mundo con la perspectiva siempre inquietante, siempre contestaría, siempre inquistoria de la juventud. En este libro se retrata no sólo a la sociedad, sino incluso la diversidad que podemos encontrar en el microuniverso juvenil: desde el autor que a pesar de sus escasos años demuestra una gran madurez y oficio en las letras, hasta el que joven atolondrado que avanza dando traspiés en la siempre difícil senda de la creación literaria. Sin duda alguna, un libro ameno e interesante, que vale la pena leer.